En el diligente estudio de la Biblia encontrará el agua de vida para el alma, la vida espiritual y la vida cotidiana. Cristo se refirió al agua, la cual necesitamos para subsistir, a fin de ilustrar la necesidad que tenemos de Él en nuestras vidas. Para gozar de esta experiencia de beber el agua de vida, debe uno estudiar la Biblia cada día. Esta lección explica por qué estudiamos la Biblia.
Podemos recibir bendición e instrucción al leer la Biblia, aún si no la comprendemos totalmente. Pero el gozo pleno del conocimiento bíblico se alcanza sólo a través del estudio diligente. Por ello necesitamos cierta información básica. En esta lección aprenderemos cómo se escribió la Biblia, sus ideas centrales, unidad y divisiones.
En esta lección usted estudiará el lenguaje literal y figurativo, la organización de ideas y estilos de escritura. Los escritores de la Biblia escogieron bien sus palabras y las ordenaron para cumplir sus propósitos. El estudio de la forma en que los escritores expresaron sus ideas le ayudará en su estudio de la Biblia. Comprenderá mejor ciertos pasajes, como: "Yo soy la vida, vosotros los pámpanos." Podrá captar mejor la idea principal en un pasaje de las Escrituras. Podrá comprender mejor el propósito del escritor cuando identifica su estilo o manera de expresarse.
La preparación de este libro, Cómo estudiar la Biblia, requirió la participación de más de 20 personas, en un proceso de unos 35 pasos. Muchos de los pasos se completaron en semanas y algunos de ellos tuvieron que rehacerse. Este libro es sólo uno de una serie de libros que se han escrito y siguen escribiéndose para ayudarle a conocer a Dios y su voluntad para su vida. Hace pocos años, toda esta tarea parecía imposible. Se está logrando porque trazamos un plan de acción. De la misma forma usted logrará entender y practicar el estudio de las Escrituras, aplicando los principios de esta lección.
Necesitamos una "dieta completa" de la Palabra de Dios para crecer y llegar a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo (Efesios 4:13). Debemos participar gustosamente de la Palabra de Dios día tras día para alcanzar esta meta.
Jesús dijo: "Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás" (Juan 6:35). Como el pan de vida, Cristo es nuestra fuente de vida. Para comprender mejor nuestra vida en Cristo, necesitamos estudiar lo que cada libro de la Biblia dice acerca de El. Nuestra fe aumenta a la par con nuestros conocimientos.
Cuando algo no es muy claro acerca de la vida cristiana, es recomendable hacer un estudio temático de ese tema. Quizá quiera saber cómo vivir por fe. ¿O acaso necesita ser bautizado con el Espíritu Santo? ¿Sabe quién es usted en Cristo? ¿Cómo puede vivir en santidad? Cualquiera que sea el tema, un estudio del mismo le mostrará un poco más del plan de Dios para su vida.
En ésta lección aprenderá los fundamentos necesarios para el estudio de personajes bíblicos, sus vidas, talentos, errores y victorias. Los ejemplos que estudiará le ayudará a comprender desde el punto de vista bíblico, que la naturaleza humana ha sido la misma desde el principio de la historia. La obra redentora de Cristo es el único medio que puede cambiar, perdonar y transformar el espíritu y la conducta del ser humano.